Una de las bandas más originales que ha parido la música independiente patria en los últimos meses se llama Boat Beam. Un trío de ases que encuentra en los instrumentos de cuerda y en las melodías su forma de posicionarse en el complejo mundo de la música. Hablamos con una de sus componentes, Aurora, la española de la banda, que nos cuenta las primeras impresiones de su increíble debut, el disco "Puzzle Shapes".
P - Pregunta de rigor. ¿Cómo una australiana, una norteamericana y una española llegan a formar una banda y llamarse "Boat Beam"?
R - Pues la respuesta es bastante sencilla: realmente son las ganas de hacer música lo que lleva a los músicos en general a agruparse. Una suma de casualidades como el hecho de que Josephine y Alisha trabajaran en la misma Academia y decidieran juntarse, el que yo (Aurora) las conociera a través de un amigo común y me encantaran, y el que ellas me acogieran cuando me ofrecí como chelista, es lo que fraguó Boat Beam.
P - Vuestra música resalta por unos juegos melódicos, preciosistas y cuidados. ¿Cómo la veis vosotras?
R - Para nosotras sí, existe eso, puesto que empleamos instrumentos eminentemente melódicos como las cuerdas, y ponemos mucho esmero en las líneas melódicas que desarrollamos con éstos y con las voces; pero también están las armonías cromáticas de la guitarra o el teclado, que es lo que aporta el color a las canciones; y las letras, que desarrollan la dimensión conceptual, volviendo el mensaje mucho más profundo y rico en significados.
P - Supongo que encontraréis influencias en mogollón de artistas. ¿Podéis ilustrarnos con algunos que hayan sido determinantes para que hagáis lo que hacéis?
R - Hay muchos. Para Aurora y Alisha, sobre todo nuestras influencias proceden del mundo de la musica clásica, en sus periodos antiguo y contemporáneo especialmente. Pero para las tres, obviamente, hay influencias más conocidas, como grupos de indie rock, como Modest Mouse, Metric, The Dresden Dolls y cantantautores como Elliot Smith o Sufjan Stevens.
P - Vuestro disco parece extraído de una época romántica y la música clásica es una influencia evidente, pero... ¿consumís música contemporánea?
R - Por supuesto que sí. Nos interesa muchísimo el saber lo que se cuece en el mundo musical, en cualquier terreno, incluida la música contemporánea de lo que se suele denominar genéricamente como "música clásica" (habría que inventar un nuevo término menos anacrónico).
P - Vuestro debut, Puzzle Shapes, da un meneo a la música que venía haciéndose en España en cualquier género o sentido. Es decir, sois de lo más original que hemos escuchado últimamente. ¿Qué os parece esta impresión? ¿Sois conscientes de ello?
R - Es difícil para nosotras el colgarnos ese tipo de medallas sabiendo que existen bastantes músicos con propuestas interesantísimas y realmente diferentes. Sencillamente nos limitamos a hacer, de manera visceral, lo que nos gusta.
P - ¿Estáis de acuerdo con la etiqueta indie que os cuelgan los medios de comunicación?
R - No nos entusiasma el hecho en sí de las etiquetas, aunque somos conscientes de que en cierto modo es necesario para poder entendernos. Y bueno, "indie" es un concepto tan holgado, que no lo sentimos como un traje a punto de estallar por las costuras.
P - ¿Habéis encontrado lo que andabais buscando con este disco?
R - La idea de Josephine era grabar unas canciones ricas en sonoridades y llenas de capas; crear un disco con el que se pudiera viajar por diferentes atmósferas, desde las más contemplativas a las más enérgicas; recrear aromas musicales diversos para escapar de la monotonía que, a veces, supone el ceñirse a un estilo demasiado específico... Y sí, creemos que está conseguido.
P - ¿Cómo trasladáis al directo la infinidad de sonidos y atmósferas que sois capaces de evocar en "Puzzle Shapes"?
R - Pues con muchas horas de ensayo y esfuerzo por nuestra parte, porque, obviamente, con el formato que normalmente hemos estado desarrollando, ¡nos faltan manos, bocas y pies como para tocarlo todo! Partimos desde lo más básico (aquéllo que caracteriza a cada canción), y sobre ello vamos construyendo, bien reciclando arreglos que vemos que funcionan, o creando otros nuevos. Aunque no pretendemos presentar una versión literal de lo que se puede escuchar en el disco (porque, como ya he descrito antes, es logísticamente imposible), tampoco queremos alejarnos mucho de él; sin embargo, el "juguetear" con las canciones es algo que nos gusta mucho, porque siempre un lavado de cara se agradece en un momento dado (ayuda a mantener el interés por seguir tocando esas canciones, y a que éstas no mueran de tedio o se arrastren como viejas en el escenario).
P - ¿Qué más podemos esperar de Boat Beam en el futuro? ¿Dónde os veis en una temporada? ¿Y dónde podremos veros nosotros?
R - ¡Qué difícil es dar respuesta a la última pregunta! Tendremos que consultarlo en nuestra bola de cristal... ¡jajaja! Lo que sí que podemos asegurar es que vamos a seguir trabajando muy seriamente para mejorar como músicos, como artistas, y, lo más importante, como personas.
P - Pregunta de rigor. ¿Cómo una australiana, una norteamericana y una española llegan a formar una banda y llamarse "Boat Beam"?
R - Pues la respuesta es bastante sencilla: realmente son las ganas de hacer música lo que lleva a los músicos en general a agruparse. Una suma de casualidades como el hecho de que Josephine y Alisha trabajaran en la misma Academia y decidieran juntarse, el que yo (Aurora) las conociera a través de un amigo común y me encantaran, y el que ellas me acogieran cuando me ofrecí como chelista, es lo que fraguó Boat Beam.
P - Vuestra música resalta por unos juegos melódicos, preciosistas y cuidados. ¿Cómo la veis vosotras?
R - Para nosotras sí, existe eso, puesto que empleamos instrumentos eminentemente melódicos como las cuerdas, y ponemos mucho esmero en las líneas melódicas que desarrollamos con éstos y con las voces; pero también están las armonías cromáticas de la guitarra o el teclado, que es lo que aporta el color a las canciones; y las letras, que desarrollan la dimensión conceptual, volviendo el mensaje mucho más profundo y rico en significados.
P - Supongo que encontraréis influencias en mogollón de artistas. ¿Podéis ilustrarnos con algunos que hayan sido determinantes para que hagáis lo que hacéis?
R - Hay muchos. Para Aurora y Alisha, sobre todo nuestras influencias proceden del mundo de la musica clásica, en sus periodos antiguo y contemporáneo especialmente. Pero para las tres, obviamente, hay influencias más conocidas, como grupos de indie rock, como Modest Mouse, Metric, The Dresden Dolls y cantantautores como Elliot Smith o Sufjan Stevens.
P - Vuestro disco parece extraído de una época romántica y la música clásica es una influencia evidente, pero... ¿consumís música contemporánea?
R - Por supuesto que sí. Nos interesa muchísimo el saber lo que se cuece en el mundo musical, en cualquier terreno, incluida la música contemporánea de lo que se suele denominar genéricamente como "música clásica" (habría que inventar un nuevo término menos anacrónico).
P - Vuestro debut, Puzzle Shapes, da un meneo a la música que venía haciéndose en España en cualquier género o sentido. Es decir, sois de lo más original que hemos escuchado últimamente. ¿Qué os parece esta impresión? ¿Sois conscientes de ello?
R - Es difícil para nosotras el colgarnos ese tipo de medallas sabiendo que existen bastantes músicos con propuestas interesantísimas y realmente diferentes. Sencillamente nos limitamos a hacer, de manera visceral, lo que nos gusta.
P - ¿Estáis de acuerdo con la etiqueta indie que os cuelgan los medios de comunicación?
R - No nos entusiasma el hecho en sí de las etiquetas, aunque somos conscientes de que en cierto modo es necesario para poder entendernos. Y bueno, "indie" es un concepto tan holgado, que no lo sentimos como un traje a punto de estallar por las costuras.
P - ¿Habéis encontrado lo que andabais buscando con este disco?
R - La idea de Josephine era grabar unas canciones ricas en sonoridades y llenas de capas; crear un disco con el que se pudiera viajar por diferentes atmósferas, desde las más contemplativas a las más enérgicas; recrear aromas musicales diversos para escapar de la monotonía que, a veces, supone el ceñirse a un estilo demasiado específico... Y sí, creemos que está conseguido.
P - ¿Cómo trasladáis al directo la infinidad de sonidos y atmósferas que sois capaces de evocar en "Puzzle Shapes"?
R - Pues con muchas horas de ensayo y esfuerzo por nuestra parte, porque, obviamente, con el formato que normalmente hemos estado desarrollando, ¡nos faltan manos, bocas y pies como para tocarlo todo! Partimos desde lo más básico (aquéllo que caracteriza a cada canción), y sobre ello vamos construyendo, bien reciclando arreglos que vemos que funcionan, o creando otros nuevos. Aunque no pretendemos presentar una versión literal de lo que se puede escuchar en el disco (porque, como ya he descrito antes, es logísticamente imposible), tampoco queremos alejarnos mucho de él; sin embargo, el "juguetear" con las canciones es algo que nos gusta mucho, porque siempre un lavado de cara se agradece en un momento dado (ayuda a mantener el interés por seguir tocando esas canciones, y a que éstas no mueran de tedio o se arrastren como viejas en el escenario).
P - ¿Qué más podemos esperar de Boat Beam en el futuro? ¿Dónde os veis en una temporada? ¿Y dónde podremos veros nosotros?
R - ¡Qué difícil es dar respuesta a la última pregunta! Tendremos que consultarlo en nuestra bola de cristal... ¡jajaja! Lo que sí que podemos asegurar es que vamos a seguir trabajando muy seriamente para mejorar como músicos, como artistas, y, lo más importante, como personas.
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